Un proyecto que crea NFTs a partir del trabajo de mujeres artesanas de la región del Gran Chaco suramericano busca crear audiencias globales para el arte nativo.
Jessica y su mamá caminan juntas recolectando palma de Carandillo para su labor diaria. En silencio, en medio del monte del Chaco sudamericano aprovechan el sol para secar la fibra, deshebrarla y comenzar a entrelazar cada hilo para formar obras artesanales: cestas, canastas y piezas ornamentales; arte de manos nativas que guarda historia, cultura y generaciones de vivencia en el monte. Mientras caminan de retorno a su hogar, Jessica se atreve a preguntar en voz alta: —Mamá, ¿será que no nos ven?
A 3 600 metros de altitud en las montañas de los Andes, en la ciudad de La Paz, Mirna, una caligrafista e ilustradora digital con un talento único para el arte gráfico, dibuja imágenes de las mujeres de pollera de su tierra para contar sus historias, sus expresiones culturales y sus anhelos. Sueña con algún día llevar sus imágenes de las “cholitas”, mujeres que representan la fortaleza de su amada Bolivia, a grandes galerías internacionales. Pero, abruptamente, una duda surge en su mente: «¿Habrá alguien que quiera exponer mi arte?»
Mientras tanto, miles de kilómetros al norte, Susana descansa luego de un día de trabajo sentada frente al fuego de la chimenea en su hogar que la resguarda del invierno. Cierra el día luego de una atareada jornada de reuniones junto a sus colegas del Comité de Arte en el Washington State Convention Center. Se trata de una infraestructura de 139 000m2 ubicada en la metropolitana Seattle que le ha asignado la tarea de buscar obras que decoren sus lujosas salas. Ella piensa, con algo de optimismo, cuánto le gustaría mostrar arte de su tierra boliviana y mostrar su identidad Latina en esa impresionante galería. Se detiene y duda: «¿cómo podría traer obras de mi tierra hasta aquí, con todos los costos y dificultades logísticas?»
Al final del día, en el silencio de sus distintas realidades, en el Chaco, en La Paz y en Seattle, una misma pregunta hace eco en los pensamientos de Jessica, de Mirna y de Susana: «¿será que no nos ven?».
En 2021, organizaciones como el BID LAB, Fundación AVINA, WTT (World-Transforming Technologies), Fundación Gran Chaco, Grupo SUNU y NATIVA, comprometidas con el desarrollo del Gran Chaco Americano, lanzaron una convocatoria llamada #ChacoInnova, impulsada con el objetivo de responder a la apremiante situación de más de 2 000 artesanas de esta región, impedidas de vender sus obras por el aislamiento de sus comunidades y la migración campo-ciudad, situación agravada por la pandemia global. CAMINNOS, un Laboratorio de Innovación Social ubicado en Bolivia, respondió a la invitación, presentando su más reciente proyecto “IMPACT NFT”, que surgió con el propósito de utilizar tecnología disruptiva para valorizar y promocionar el arte nativo en las comunidades rurales.
IMPACT NFT es la única experiencia de arte digital en el mundo que permite que creadoras, artistas digitales, coleccionistas y curadoras puedan co-crear arte nativo juntos
IMPACT NFT fue elegido para potenciar el desarrollo del Chaco Americano a través de soluciones comerciales innovadoras. CAMINNOS estructuró un proyecto en el que mujeres artesanas como Jessica pueden encontrarse cara a cara con artistas digitales como Mirna y curadoras de arte como Susana para que, juntas, en un proceso de co-creación tomen la esencia de la artesanía del Chaco y la transformen en arte digital, lo registren y verifiquen como piezas auténticas, gracias a la tecnología Blockchain. Este proyecto permitirá que las piezas de arte digital puedan llegar a Galerías de Criptoarte, en las que, transformadas en Tokens No-Fungibles (NFTs), puedan ser comercializadas a gran escala en un mercado global y sin fronteras que movió 17 mil millones de dólares solo en 2021. Las obras creadas serán lanzadas como la primera colección de arte nativo digital del Gran Chaco Americano, permitiendo que la cultura del Chaco se difunda a nivel internacional y forme parte del importante contexto económico de la cadena de bloques y las criptomonedas.
Hoy, el proyecto IMPACT NFT cuenta con una constelación de colaboradores: doce artistas digitales de Argentina, Colombia, España, Bolivia, además de una decena de curadores de arte con una importante trayectoria en el contexto cultural, artístico y financiero, una red de ONGs que coordinan y articulan este proyecto y las protagonistas: más de 2 000 artesanas que crean arte y luchan por lograr que su cultura perdure.
En abril de 2022, el proyecto logró un hito notable: un importante coleccionista de la India, miembro del selecto grupo de celebridades que han adquirido obras digitales de la colección Bored Ape Yacht Club, la más prestigiosa y costosa en el mercado de los NFTs a nivel mundial y cuyas piezas bordean el precio individual de 300 000 USD, se unió al proyecto con la intención de adquirir las obras NFT de la colección y de forjar una alianza con CAMINNOS para lanzar una colección internacional y replicar este proyecto en otras regiones. Pronto, una experiencia inmersiva hará posible que los coleccionistas viajen al Chaco para conocer a las artesanas, visitar su comunidad, producir arte en el monte y generar impacto social adquiriendo los NFTs.
El proyecto busca revalorizar el arte nativo del Gran Chaco a través de iniciativas y eventos presenciales y digitales que visibilicen la cultura de esta región a escala internacional. Al mismo tiempo, tiene el enfoque de capacitar a las artesanas de la región en técnicas de ilustración digital, finanzas descentralizadas, arte NFT y tecnología de cadena de bloques, dotando a las comunidades de equipos digitales para la captura de sus obras artesanales y su transformación en arte digital. Todo esto con la finalidad de dar solución a las limitaciones y barreras que dificultan a las artesanas la comercialización de sus obras, dificultades que se hicieron aún más profundas durante la pandemia.
IMPACT NFT es la única experiencia de arte digital en el mundo que permite que creadoras, artistas digitales, coleccionistas y curadoras puedan co-crear arte nativo juntos y vivir experiencias interculturales que generen verdadero impacto a través de la protección y promoción de la cultura de comunidades rurales. Como organización de emprendimiento social, creamos camin(n)os que unen a la cultura y la innovación, para que las mujeres sepan que no son invisibles sino que son vistas como un ejemplo de fortaleza y resiliencia, que su labor es fundamental para el crecimiento de las comunidades y que su arte preserva la belleza de nuestra cultura.
